Marina Botafoch presenta un recurso de reposición a la resolución denegatoria de prórroga de Autoridad Portuaria

En el texto elevado al ente portuario, la empresa concesionaria desmiente los argumentos con los que se pretende justificar la denegación

Puerto Deportivo Botafoch SL, empresa concesionaria de Marina de Botafoch, ha elevado al Consejo de Administración de Autoridad Portuaria de Baleares un recurso de reposición a la resolución emitida el pasado mes de abril en la que le denegaba la prórroga en la gestión del puerto deportivo. Un documento en el que Puerto Deportivo Botafoch rebate uno por uno, adjuntando documentación de respaldo, los principales motivos argüidos por el ente portuario: las sobreocupaciones registradas en la zona comercial, la insuficiencia económica en la oferta presentada para la prórroga y la falta de interés portuario en el proyecto presentado por la concesionaria.

Así, en el caso de las sobreocupaciones en la zona comercial, Marina Botafoch ha recordado que este exceso se debe “a la realización por los concesionarios de locales comerciales de cerramientos en las terrazas” y que “es, en todo caso, un asunto heredado que no es culpa de la empresa concesionaria”. Además, cabe destacar que, tal y como se escribe en el recurso de reposición, la concesionaria “carece de potestad a los efectos de su prevención y remoción”. De hecho, Puerto Deportivo Botafoch ha manifestado en múltiples ocasiones a la Autoridad Portuaria su voluntad de encontrar soluciones a esta problemática a la que el ente portuario no ha dado nunca respuesta. La empresa esgrime que carece de capacidad sancionadora y que quien la tiene es, “precisamente, la propia Autoridad Portuaria, que ha hecho caso omiso a los reiterados avisos hechos por la concesionaria”. Por ello el texto concluye que “no existe un incumplimiento de las obligaciones del Puerto Deportivo Botafoch, sino que es el ente portuario quien ha incumplido las suyas al no atender de manera activa y contumaz a la petición de auxilio administrativo”. Desde la empresa cuestionan que “si tan importante era este asunto, no se entiende la inacción administrativa a lo largo de todos estos años”.

Respecto a la falta de interés portuario en el proyecto presentado por la concesionaria, desde Puerto Deportivo Botafoch recuerdan que de las 22 propuestas de inversión “solo tres fueron cuestionadas por la Autoridad Portuaria y que todas ellas han sido objeto de modificación o renuncia por el concesionario”. Un motivo por el que, para la empresa gestora del puerto, no justifica que se hable “de una alteración fundamental del proyecto”, por lo que sentencian que “las manifestaciones de Autoridad Portuaria son inmotivadas, arbitrarias, injustificadas, y dictadas a sabiendas de la manifiesta falta de fundamento de las mismas”. Además, desde la empresa concesionaria mantienen que “en el proyecto de ampliación de plazo se recogieron propuestas que habían sido sugeridas por los propios técnicos de Puertos del Estado pese a que, en algunos casos, estas respondían a intereses contrarios a los de la propiedad accionarial”.

El tercer punto que alega Autoridad Portuaria para denegar la prórroga es la insuficiencia de la oferta económica, una afirmación que se hace basándose en un informe de un auditor independiente que, en la resolución denegatoria, la propia APB admite que es “incorrecta”, asegurando que las tasas en las que se basan los cálculos están “desactualizadas”. Por ello en su recurso la concesionaria lamenta que “quede al libre criterio del director de la APB no solo el determinar la cuantía de la inversión sino el hecho de calificarla de importante déficit”. La empresa asegura que en todo momento ha manifestado su intención de “aumentar la oferta siempre que Autoridad Portuaria justificara que así debía ser” y que no se han tenido en cuenta algunas renuncias que se han hecho del proyecto que “si bien se traducirían en una disminución de la inversión, también lo harían en los ingresos de la explotación de la concesión ampliada”.

Por último, y aunque no se ha tenido presente en la resolución final del Consejo de Administración de Autoridad Portuaria, desde la concesionaria han lamentado que en la propuesta para la denegación de la prórroga, Puertos del Estado argumentara en contra de la concesión apoyándose en las alegaciones al proyecto que presentó el Ajuntament d’Eivissa. Un documento que la concesionaria “no conoció hasta el último momento, pese a que había sido emitido hacía dos años” y que “no ha sido vinculante”, según apuntan desde Marina Botafoch. En dichas alegaciones el consistorio hacia constar su contrariedad a la construcción de un edificio social denominado Mirador y de un supuesto beach club, dos edificaciones a las que la concesionaria ya había renunciado anticipadamente; así como su negativa a que se aumentara la ocupación en el espejo de agua, “una medida que, en caso de tomarla como vinculante, podría ir en contra de la misma Autoridad Portuaria que es quien, al final, tiene la potestad de autorizar o no esta ocupación”. Por último, el Ayuntamiento declaraba inviables las obras de remodelación propuestas para el Puerto Deportivo sin la existencia de un Plan Especial del Puerto, lo que desde la concesionaria consideran “injustificado” ya que las obras propuestas “se circunscriben al perímetro delimitado del Puerto Deportivo, con un uso claramente definido”. Un Plan sin el que, en cambio, sí se han acometido, y se van a acometer, “obras mucho más sensibles y que condicionan el futuro del puerto como el edificio de Es Martell, el tanque de tormentas del puerto, el proyecto de aparcamiento subterráneo previsto en la Avenida Santa Eulària o el traslado de la Estación Marítima de Formentera”, matizan.

Por todo ello desde Puerto Deportivo Botafoch ponen en duda el proceso por el que se ha resuelto la petición de prórroga, y resaltan “las enormes deficiencias que ha habido en la conformación del expediente denegatorio”. La empresa concesionaria mantiene que “la prórroga es la opción más asequible para los aficionados a la náutica de las Pitiusas” ya que, tal y como ha pasado en otras marinas de la isla, “sacar el Puerto Deportivo a concurso público podría derivar en tarifas imprevisibles y alejadas de las posibilidades de la mayoría de amantes del mar”.